Este es el archivo del sitio histórico de la Subsecretaría de Prevención del Delito entre 2020 y abril de 2021.

Para acceder al sitio web actual ingresar a subprevenciondeldelito.gob.cl

  1. Home
  2. /
  3. Noticias
  4. /
  5. Inauguración del Ministerio de...

Inauguración del Ministerio de Seguridad Pública marca un nuevo hito en la lucha contra el crimen organizado y la delincuencia

La nueva cartera, que comienza a operar hoy, será encabezada por el ministro Luis Cordero, y asumirá funciones clave en materia de seguridad interior, prevención del delito y coordinación interinstitucional, consolidando una respuesta estatal robusta.
La nueva cartera, que comienza a operar hoy, será encabezada por el ministro Luis Cordero, y asumirá funciones clave en materia de seguridad interior, prevención del delito y coordinación interinstitucional, consolidando una respuesta estatal robusta.
Facebook
Twitter
Email

Hoy martes 1 de abril comienza oficialmente la operación del nuevo Ministerio de Seguridad Pública, institución creada para liderar de manera más eficaz las políticas y acciones del Estado en materia de seguridad. Su instalación representa un cambio estructural significativo, al asumir funciones previamente a cargo del Ministerio del Interior y sumar nuevas responsabilidades y capacidades.

El primer ministro de Seguridad Pública será Luis Cordero, quien hasta ahora se desempeñaba como subsecretario del Interior. Su designación fue anunciada por el Presidente Gabriel Boric, destacando su experiencia y conocimiento para liderar este proceso institucional.

El Ministerio nace a partir de la ley promulgada el 27 de enero de 2025, y fue concebido como una respuesta del Estado para combatir con mayor eficacia el crimen organizado, el narcotráfico, el terrorismo y otras amenazas que afectan a la seguridad pública. Esta nueva institucionalidad se encargará del resguardo, mantención y promoción de la seguridad y el orden público, así como de la prevención del delito y la protección de las personas.

Entre sus principales atribuciones se encuentra la formulación y evaluación de políticas y estrategias de seguridad, tanto a nivel local como internacional. Para ello, se creará un Sistema de Seguridad Pública que integrará a Carabineros, Policía de Investigaciones, Gendarmería, la Agencia Nacional de Inteligencia, el Servicio de Impuestos Internos, Aduanas, entre otras instituciones. Este sistema velará por asegurar el orden público, prevenir el delito y fomentar la coordinación entre entidades.

Asimismo, se implementará el Centro Integrado de Coordinación Policial (Cicpol), que asesorará al ministro en la identificación de riesgos, coordinación de operaciones policiales complejas y facilitación del intercambio de información estratégica entre organismos públicos y privados. Esta unidad será liderada por un oficial general designado por el ministro.

El nuevo Ministerio operará desde el primer día sin período de marcha blanca, integrando avances previos en seguridad como el aumento del presupuesto desde 2022, el plan nacional contra el crimen organizado y ajustes en planes operativos como “Calles sin Violencia”.

Estructura descentralizada

La creación de esta cartera también considera una estructura territorial descentralizada, mediante Secretarías Regionales Ministeriales (Seremis) que representarán al ministerio en cada región. Estas autoridades serán responsables de coordinar a las policías a nivel local, rol que anteriormente recaía en los delegados presidenciales. Además, se crearán departamentos provinciales de Seguridad Pública, que operarán de forma flexible según las características geográficas y de conectividad de cada zona.

Los futuros seremis deberán contar con al menos tres años de experiencia profesional en áreas vinculadas a la seguridad o prevención del delito, o bien seis años de experiencia profesional general, asegurando así una dirección técnica y especializada en los territorios.

Este nuevo modelo de gestión en seguridad pública se caracteriza por su enfoque integral, preventivo y basado en evidencia, con políticas sostenidas y mecanismos claros de rendición de cuentas. El objetivo es avanzar hacia una seguridad más eficaz, estructurada y que no dependa de la contingencia, fortaleciendo la capacidad del Estado para proteger a las personas y enfrentar los desafíos del siglo XXI.